Si bien el teletrabajo ha logrado dar continuidad a nuestras actividades laborales de forma constante durante más de 1 año con el inicio de la pandemia, hoy representa una modalidad de trabajo que en el mundo comienza a ser ampliamente regulada con el fin de dirimir en aspectos como la privacidad, intimidad y desconexión. Para el caso de américa latina, los países que recientemente han comenzado a legislar al respecto son Argentina (Ley 2755 de 2020), Chile (Ley 21222 de 2020), Ecuador (Acuerdo Min. De 2016 Ref 2018, 2020), Bolivia (Decreto 4218 y reglamentación 2020) y Panamá (Cod. Trabajo 2020). En Colombia, en materia de legislación se encuentra reglamentado en la Ley 1221 del 2008 el decreto 884 del 2012, pero hoy, los retos más desafiantes para las compañías en cuanto al teletrabajo son los temas asociados a la seguridad de la información, medir y mejorar la productividad del trabajador remoto y minimizar el soporte que requieren estos teletrabajadores.
Mantener políticas de seguridad, procedimientos y protocolos, actualizar los programas de protección antimalware y firewall, realizar programas de backup de información y ejecutar frecuentemente programas de concientización para el adecuado uso de la información corporativa son los aspectos más recomendados en materia de seguridad de la información.
La medición de la productividad de los trabajadores hoy resulta ser algo nuevo para muchas compañías que anteriormente no realizaban este tipo de actividades, por tanto, resulta extraño, incluso muy audaz pensar que actividades como grabación de sonidos o pantalla y geolocalización puedan ser posibles para mantener a los teletrabajadores altamente productivos. Existen otros métodos menos intrusivos que pueden ayudarle a comenzar a medir la productividad de sus trabajadores asociadas al uso de las herramientas microinformáticas y las actividades de colaboración y co-creación.
Así mismo, el monitoreo constante de la disponibilidad, capacidad y la experiencia del usuario con las aplicaciones, permite evitar actividades de soporte e incluso si llegase a requerirlo, permite ejecutar diagnósticos más agiles sobre fallas en los dispositivos de los trabajadores.
En Arus podemos acompañarlo a resolver estos retos que el teletrabajo ha traído consigo.
En ARUS queremos acompañarte a resolver estos nuevos retos.